¿A qué estamos jugando?
Aclaración previa: El post está inspirado únicamente en acontecimientos de la década del 90. (no lo relacionen con el golpe de Estado).
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Van ya un par de años desde que comenzó una especie de campaña de "bombardeos informativos" con versiones "B" de la historia reciente. Es como si en medio de la mentira una camada de nobles periodistas hubiese nacido para iluminarnos de la nebulosa que distorsionaba la realidad.
E increiblemente, más que luz, esa camada de periodistas generó una suerte de dogma, donde muchas personas que los siguen ya dan por verdad hasta los cuestionamientos más absurdos que a uno se le pueden ocurrir.
Ahi es cuando me siento y reflexiono sobre la seriedad de los comunicadores. Comunicadores que hace 10 años nos decían una cosa, y que hoy, mientras siguen trabajando en los mismos medios, nos dicen todo lo contrario. Y el problema no data en un hecho puntual, sino que más bien se vuelca sobre todo acontecimiento acaecido sobre los cuales se les puede sacar un poco de jugo para generar conflictividad.
¿Cómo es posible ésto? ¿Acaso hace 10 años éramos todos ciegos? ¿O este país era tan corrupto que no se podía distinguir la mentira de la verdad? ¿O la democracia era una fachada ya que los periodistas se veían obligados a informar las "versiones oficiales" de los hechos?
Y cuando tengo que responder esas preguntas me veo obligado a dudar sobre el profesionalismo de los periodistas. Porque podrán atribuirse a los gobiernos anteriores muchos errores (y horrores), pero de ahí a creer que ellos inventaban las noticias que se tenían que dar a la población hay una gran diferencia.
Y hoy que hay una tendencia de re-escribir todo lo que hasta ayer parecía saldado. ¿Qué van a hacer para que crea en ello? ¿Demostrarme que éste era un pueblo de ignorantes y ciegos?
Gran problema. Si estoy equivocado y ésta camada de periodistas tiene la razón, en el día de ayer algo los obligó a callarse (y ahí seguimos con las teorías conspirativas; materia prima no falta). Y si tengo la razón, estas personas quieren escribir la historia, no con la verdad, sino con un afán interesado. Y si es así, la responsabilidad no es solo de estos periodistas. También son responsables aquellos que colaboran en crear el caldo de cultivo de la confusión para transgiversar aquellos hechos que a ellos les hubieran gustado que fueran de otra forma. Hacer eso es un error hasta para las corrientes de pensamientos afines a esas personas. Porque el presente debería construirse con elementos del presente, no con ponchos y gominas que para peor son de mentira.
Hoy llegué al clímax de mi asombro cuando escuché en un programa matutino a un sujeto que "estudia" fenómenos paranormales (disculpenme, pero le creo menos que poquito a aquél que dice que se comunica con los extraterrestres), quién no solo atribuyó con absoluta certeza la autoría de los atentados del 11 de Setiembre al gobierno norteamericano, sino que para mejor dijo que las torres gemelas estaban llenas de ovnis al momento del los atentados.
Y el tipo lo afirmaba como que fuera una verdad confirmada. Y el entrevistador, en vez de decirle "¿no te parece un poquito cuestionable tu opinión?", le seguía preguntando cosas como si partiera de la base que todo lo dicho fuese verdad. Y claro, puede ser verdad lo que éste hombre decía, porque como poder todo es posible, pero a mi me suena un tanto ridículo.
Así odiase a Estados Unidos con toda mi alma (desprecio que creo no sentir por ningún país de la tierra) no se me pasaría por la cabeza atribuir semejante atrocidad a su gobierno por el mero hecho de desprestigiarlos.
(Idéntica reflexión me motivó aquél que dijo que los 800.000 dólares del famoso maletín los envió Bush para generar controversia entre Mr. K y Chávez).
Pero claro, estos dos hechos tampoco motivaron mi post porque estaba hablando de fenómenos nacionales. Pero no tiene importancia en qué me inspiré. Lo único que me importa es dejar en claro que la historia no debería escribirse por izquierdas y derechas. Esa política hipócrita está para las campañas políticas, está para engañar al electorado, no para colaborar con el desarrollo de una mentalidad nihilista en la que ya nada parece haber sido ni así ni asá.
Pero la realidad lamentablemente nos dice que si Hitler hubiese ganado la guerra los nazis serían todos geniales.
"Algunos periodistas están flechados"... Lo dice la izquierda, lo dice la derecha.
(pequeña aclaración en los comments)
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Van ya un par de años desde que comenzó una especie de campaña de "bombardeos informativos" con versiones "B" de la historia reciente. Es como si en medio de la mentira una camada de nobles periodistas hubiese nacido para iluminarnos de la nebulosa que distorsionaba la realidad.
E increiblemente, más que luz, esa camada de periodistas generó una suerte de dogma, donde muchas personas que los siguen ya dan por verdad hasta los cuestionamientos más absurdos que a uno se le pueden ocurrir.
Ahi es cuando me siento y reflexiono sobre la seriedad de los comunicadores. Comunicadores que hace 10 años nos decían una cosa, y que hoy, mientras siguen trabajando en los mismos medios, nos dicen todo lo contrario. Y el problema no data en un hecho puntual, sino que más bien se vuelca sobre todo acontecimiento acaecido sobre los cuales se les puede sacar un poco de jugo para generar conflictividad.
¿Cómo es posible ésto? ¿Acaso hace 10 años éramos todos ciegos? ¿O este país era tan corrupto que no se podía distinguir la mentira de la verdad? ¿O la democracia era una fachada ya que los periodistas se veían obligados a informar las "versiones oficiales" de los hechos?
Y cuando tengo que responder esas preguntas me veo obligado a dudar sobre el profesionalismo de los periodistas. Porque podrán atribuirse a los gobiernos anteriores muchos errores (y horrores), pero de ahí a creer que ellos inventaban las noticias que se tenían que dar a la población hay una gran diferencia.
Y hoy que hay una tendencia de re-escribir todo lo que hasta ayer parecía saldado. ¿Qué van a hacer para que crea en ello? ¿Demostrarme que éste era un pueblo de ignorantes y ciegos?
Gran problema. Si estoy equivocado y ésta camada de periodistas tiene la razón, en el día de ayer algo los obligó a callarse (y ahí seguimos con las teorías conspirativas; materia prima no falta). Y si tengo la razón, estas personas quieren escribir la historia, no con la verdad, sino con un afán interesado. Y si es así, la responsabilidad no es solo de estos periodistas. También son responsables aquellos que colaboran en crear el caldo de cultivo de la confusión para transgiversar aquellos hechos que a ellos les hubieran gustado que fueran de otra forma. Hacer eso es un error hasta para las corrientes de pensamientos afines a esas personas. Porque el presente debería construirse con elementos del presente, no con ponchos y gominas que para peor son de mentira.
Hoy llegué al clímax de mi asombro cuando escuché en un programa matutino a un sujeto que "estudia" fenómenos paranormales (disculpenme, pero le creo menos que poquito a aquél que dice que se comunica con los extraterrestres), quién no solo atribuyó con absoluta certeza la autoría de los atentados del 11 de Setiembre al gobierno norteamericano, sino que para mejor dijo que las torres gemelas estaban llenas de ovnis al momento del los atentados.
Y el tipo lo afirmaba como que fuera una verdad confirmada. Y el entrevistador, en vez de decirle "¿no te parece un poquito cuestionable tu opinión?", le seguía preguntando cosas como si partiera de la base que todo lo dicho fuese verdad. Y claro, puede ser verdad lo que éste hombre decía, porque como poder todo es posible, pero a mi me suena un tanto ridículo.
Así odiase a Estados Unidos con toda mi alma (desprecio que creo no sentir por ningún país de la tierra) no se me pasaría por la cabeza atribuir semejante atrocidad a su gobierno por el mero hecho de desprestigiarlos.
(Idéntica reflexión me motivó aquél que dijo que los 800.000 dólares del famoso maletín los envió Bush para generar controversia entre Mr. K y Chávez).
Pero claro, estos dos hechos tampoco motivaron mi post porque estaba hablando de fenómenos nacionales. Pero no tiene importancia en qué me inspiré. Lo único que me importa es dejar en claro que la historia no debería escribirse por izquierdas y derechas. Esa política hipócrita está para las campañas políticas, está para engañar al electorado, no para colaborar con el desarrollo de una mentalidad nihilista en la que ya nada parece haber sido ni así ni asá.
Pero la realidad lamentablemente nos dice que si Hitler hubiese ganado la guerra los nazis serían todos geniales.
"Algunos periodistas están flechados"... Lo dice la izquierda, lo dice la derecha.
(pequeña aclaración en los comments)
3 Comments:
No es que sienta que el periodista tiene la obligación de criticar a su entrevistado porque de cierto modo eso también sería flechar la información, pero si el lugar no es propicio para el debate porque solo canta una campana, quizás lo conveniente sería intentar marcar el terreno dando a conocer otras voces.
Mierda, me estoy contradiciendo... Soy un banana.
si si si... jajaja que importante son estos mercachifles garronero que se dicen periodistas... cuanto valen? dijo un famoso jefe de estado... a lo que sin dejar que le contesten dijo - cómpreme una docena para ir tirando...
te dejo una cosita para que veas abrazo negroleo
http://elclubnuestro.blogspot.com/
Damiani fue jefe de E?
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