Thursday, November 30, 2006

Vergüenza nacional (no me refiero a mi cuadro)

retomamos a la escritura. Gracias x el aguante de estos días.
Hoy pensaba escribir sobre algo muy interesante, pero me veo obligado a postergarlo para el próximo post porque cuando me desperté prendí la tele y saltó tanta mierda de la boca del conductor del noticiero, que no puedo dejarla pasar. Voy a intentar ser moderado, porque estas cosas me enojan bastante.

Primera: Un esquizofrénico que no se sabe por qué diablos andaba suelto en vez de estar internado, degolló a la abuela y mató a un minusválido en Las Piedras.
Me cago en su puta reinserción social y en su reeducación; el animal este degolló a la abuela y mató a un minusválido... y claro, como es inimputable no va a ir ni en cana. ¿Hasta cuándo se pueden tolerar estas bestialidades en un país donde hay tantas carencias y tanta gente que realmente merece una segunda oportunidad? Ya que no todos en Uruguay tienen derecho a una segunda oportunidad, me resultaría mucho más justo que el Estado se la diere a alguien que la merezca, o por lo menos a alguien que no haya matado a su abuela y a un minusválido con un cuchillo (y recalco lo del cuchillo por los medios con los que se cometió el delito).
De paso, obviamente que el que estaba a cargo del cuidado de este sujeto no va a ir en cana (y ese sí es imputable, y es casi tan responsable como el inimputable, que valga el juego de palabras, no es responsable -punible- penalmente).

Segundo: esta es del fin de semana. El anormal del kinesiólogo de la tercera división de Rampla Juniors no tuvo mejor idea que tirar cal viva en los ojos del Juez del partido (quién parece que puede perder la vista en uno de los 2). Eso es ser cagón, porque de última, en el peor de los casos, vas, te ponés los huevos donde los tenés que tener, y te cagás a piñas... pero no tirar cal a los ojos para dejar ciego a alguien (y para peor en un partido entre dos cuadros de tercera división de un fútbol de... eso no pasa en el Real Madrid- Barcelona -lo cual tb sería una anormalidad- y viene a pasar acá). ¿hasta cuándo se pueden soportar estas cosas?.

Reflexión final: Como habrán notado, intenté ser moderado, pero estas cosas me enojan y me duelen. Uno puede admitir vivir en un país con dificultades y puede aceptar muchas cosas que para los primermundistas son impensables, pero justificar a bestias como estas cuando está comprobado que hicieron lo que hicieron es algo absurdo. Claro, la mayor parte de la gente piensa que deben tener una segunda oportunidad (es lo que dice nuestra Constitución). A mi gusto, quién degolla a una abuela de 82 años .................................................. (los desafío a que completen la frase por mí).

Y yo también quiero mucho a nuestra Constitución. Precisamente, por alcanzar el ideal de lo que yo entiendo justicia (evitar que un sujeto le haga daños ilegítimos a otro... más aún si eso implica la violación de los Derechos Humanos de primera generación), pregono que completen mis frases punteadas dándole uso a vuestra imaginación.

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